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Ercávica

Ercávica se construyó bajo el castro de Santaver (municipio actual de Cañaveruelaso), promontorio que domina el río Guadiela. Se trata de una ciudad de calles rectas y bien trazadas, rodeada de murallas. En la parte alta se hallaba la Acrópolis o punto de defensa. A sus pies estaba el Foro central, donde se desarrollaba la vida comercial y religiosa, mientras que el resto de la ciudad se dedicaba a viviendas y servicios.

 

 

El yacimiento arqueológico de Ercávica posee un extraordinario valor patrimonial, no sólo por la entidad de sus vestigios arqueológicos, sino también por la diversidad y extensión de las áreas actualmente visitables. Ercávica constituye uno de los ejemplos más relevantes del intenso proceso de romanización en Hispania.

 

 

El río Guadiela sobre el que se asentó Ercávica es actualmente el embalse de Buendía, mantuvo el mismo nombre que la Ercávica celtíbera pero no el emplazamiento. La novilis et potens civitas que menciona el historiador romano Tito Livio, al relatar su asedio y posterior redención en el 179 a.C. Ercávica tuvo el estatuto privilegiado de municipium en época augustea (entre los años 17­15 a.C.) y el derecho a emitir moneda.

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